Prueba de Campo de Cibola

Por Ron Barn

Me gustaría comenzar este artículo con un sincero agradecimiento a James Gifford de Tesoro Electronics por seleccionarme para realizar esta prueba de campo con uno de los nuevos modelos de detectores de metal de Tesoro.

Mi primera reacción, después del tan fácil ensamble del Cibola, fue “Wow." Finalmente una gran máquina de caza para competición! El Cibola incorpora al menos una función de varios de mis preferidos modelos de Tesoro: señalización precisa con botón, multi-frecuencia seleccionable, umbral ajustable con una perilla de discriminación y sensitividad—todos al alcance del control. Estaba impresionado por el hecho de que el dinámico detector funcionaba con una batería alcalina de 9 volteos, y como siempre, estaba muy impresionado por el seguro y compacto cartón para embalar utilizado por Tesoro.

Amigos, déjenme decirles que todas similitudes con modelos pasados de Tesoro finalizan tan pronto que encienden un Cibola. El Cibola se adjunta a su correa como un perro bien entrenado esperando a ser liberado para ir a cazar! Cazar tesoros obviamente! El Cibola seguramente estará en el tope de la lista de máquinas de competición, pero este es solamente un segmento de nuestro hobby en donde este detector causará estragos. La habilidad de separación de objetivos y el casi instantáneo tiempo de recupero pondrá al Cibola al frente de su clase mientras cace en aquellos sitios de basura.

Mi primer parada después de ensamblar el detector fue mi mesa de trabajo para realizar algunas pruebas de aire en cuanto a profundidad y discriminación. Mi mesa de prueba tiene una vara de medición adjunta, y para probar la máxima capacidad comencé en una marca de 24". Amigos, tienen que ver el Cibola para creerlo. Estaba a tan solo unas marcas de distancia del punto de inicio cuando comenzaron los beeps!!! Revisé una y otra vez y era cierto. Increíble!

Ahora, tienen que entender que estaba en sensitividad máxima en el rango de impulso con baja discriminación y el umbral casi al tope. En esta configuración tendrán algunos beeps y chirridos errantes, pero la habilidad de ir profundo está. Sabiendo que la mayoría de las personas no gustan de los beeps y chirridos ocasionales, disminuí la sensitividad y el umbral hasta que el Cibola se suavizó y el chatter desapareció. Incluso con los controles disminuidos, el Cibola comenzó a dar nuevamente sonidos de objetivos claros y repetibles, justo por encima de la última marca lograda.

Desde la mesa de prueba era claro que el cazador competitivo promedio nunca tuvo el poder potencial de este detector. De hecho, la mayoría de los cazadores de competencia serían bien asesorados de comenzar con un poder/sensitividad configurado en 2 o 3. Con esa configuración puede discriminar la mayoría de los objetos basura sin pérdida notable de profundidad. Busca las monedas y fichas y despreocúpate de la mayoría de los señales basura.

Mi próximo paso en el proceso era proceder a varios sitios donde se habían encontrado muchos hallazgos en el pasado. Mi primer sitio fue uno en donde había hallado unos lindos cobres coloniales y grandes centavos junto con varios botones y hebillas coloniales. Cuando llegué allí, lo encendí y discriminé hacia abajo ya que había buscado en ese sitio muchas veces antes y sabía que los objetivos basura debían ser mínimos. De hecho, había realizado otra prueba de campo con un detector de tipo I.D. en este mismo sitio y había recuperado varias mitades de monedas en lugares muy profundos para este tipo de detector.

Mientras trabajaba metódicamente a lo largo del campo me encontré con varios fragmentos de plomo promediando un tamaño de una bala corta de calibre .22, profundamente dentro del suelo. Tenía el presentimiento de que descubrimientos más profundos me esperaban y pensé que si quedaba algo ahí afuera, precisaría de un trabajo intenso de excavación. En unos pocos momentos esa sensación se transformó en realidad. El Cibola se adjuntó a la correa y me trajo su presa! Una linda señal suave. El instinto me dijo que era una moneda o un botón.

Procedí a sacar un enchufe del área objetivo pero no había objetivo. Revisé el hoyo y estaba aún allí abajo. Como estaba en la marca de 7" o 8", comencé a agrandar los lados del hoyo asumiendo que había errado en la señalización precisa. Error! Después de despejar todo el suelo suelto fuera del hoyo, revisé y aún estaba allí abajo. Justo en el centro! En ese punto coloqué mi cinturón de equipo en el suelo y caminé de vuelta al vehículo para buscar mi pala Lesche con mango en forma de D.

De vuelta en el sitio del objetivo, procedí a sacar grandes cantidades de suelo fuera del hoyo y ya estaba por debajo del nivel donde los arados rompen el suelo todos los años. Luego de varias paleadas escanee la pila de tierra y bingo, finalmente estaba por encima del suelo. Mientras limpiaba el primer nivel de logo hacia un lado, vi que algo se deslizaba hacia un lado y se metía de nuevo dentro el hoyo, pero ya no se podía esconder. Lo levanté y cuidadosamente le limpié el lodo y me encontré que tenía en mis manos una moneda española de plata de 1788 del tamaño de una moderna moneda de 10 centavos. Fue una sensación maravillosa de un objeto que no había visto la luz del día por más de dos siglos. La moneda se encontraba en condiciones excelentes y fue colocado en un soporte separado en mi bolso.

Después de revisar el agujero y rellenarlo, y apisonar el suelo de vuelta, comencé con mi patrón nuevamente con las energías renovadas. Como antes, el Cibola parecía que me estaba presionando a ir más rápido. En el camino de retorno, estaba a 10 pies del área de donde había sacado la moneda de plata española cuando el Cibola susurró de nuevo ese suave sonido a plata. No es necesario decir que busqué mi pala nuevamente. Olvídate de la paleta. No había punto en engañarme. Una vez más, tal como antes, cavé a una profundidad superior, y luego de varias paleadas llenas de tierra, lo podía ver en la tierra suelta. Era del mismo tamaño que el primero, y puedes creerlo, era del mismo año - 1788. De todas formas estaba muy desgastada. Como para decir poco, estaba extasiado, pero al mismo tiempo no pude evitar pensar que yo, tal como otros cazadores profesionales, habíamos caminado sobre esta moneda de plata española varias veces antes.

Luego de completar la pierna de mi patrón, cambié de dirección y continué con mis barridas. A medida que me acercaba al área de los dos previos hallazgos, fui sorprendido por otra señal suave. No preguntes. Excávalo! Tal como antes, la presa del Cibola estaba en la pila de lodo—una linda y colonial pieza de botón. Mientras me eché hacia atrás y miraba el área de los 3 objetivos, estos formaban un triángulo casi perfecto. Hubiese sido virtualmente imposible no haber caminado por ahí numerosas veces antes. (Amigos, a este punto tengo que decirles que esta nueva raza de cazadores de tesoros de Tesoso no es para aquellos que temen a la pala! De hecho, quizás, Tesoro debería considerar agregar una pala a su línea de accesorios!)

En muchos otros sitios, inclusive en la playa donde se han recuperado gran cantidad de monedas a profundidades impresionantes, el poder potencial del Cibola realmente se puso en juego. Tomé el Cibola a otro sitio colonial que tenía una iglesia construida en los 1700s. Alrededor de esta iglesia tuve ese sonido familiar suave de “plata plata". Después de extraer el objeto me sentí felizmente sorprendido por un crucifijo plateado bastante viejo por su diseño y sus marcas.

Los dos sitios donde encontré objetos de plata habían sido constantemente utilizados desde 1600, uno habiendo sido un puerto de embarque importante que fue destruido y su iglesia profanada por los ingleses durante la guerra de 1812. Ahora el área del puerto es prácticamente un pantano, básicamente por la sedimentación de los últimos 2 siglos, pero pequeños campos aledaños nos brindan entrever cosas del pasado a través de ladrillos, vidrio y cerámica.

Parece ser que toda nueva generación de Tesoro está permitiendo a otros y a mi a agrandar y profundizar la ventana al pasado. Bien, suficiente sobre esto. Mi nuevo compañero de caza, “Cibola," quiere entrever de nuevo a través de la ventana.

Feliz Cacería!

* - Reimpreso con el permiso de Tesoro, "Información de Detectores de Metal" – Edición 21