El detector de metales que estas utilizando hoy en día tiene una historia sorprendentemente larga. De hecho, la historia del detector de metales es muy interesante e incluso involucra a un ex presidente!

Aparece el primer Detector de Metales

A mediados del siglo 1800, después de la invención de la electricidad, muchos científicos, académicos y los mineros de oro comenzaron a experimentar con la idea de desarrollar una máquina capaz de localizar metal enterrado bajo tierra. Un dispositivo como este sería increíblemente útil para los muchos buscadores de oro que todavía buscaban este metal precioso después de la "fiebre del oro" y, como resultado, podría hacer que la primera persona que perfeccionara un detector de metales se hiciera muy rico.

El primer detector de metales que se ha mencionado en la historia, en realidad no tuvo nada que ver con la búsqueda de oro. En su lugar, se utilizó en un intento de salvar al presidente James Garfield después de ser baleado en Washington, DC el 2 de julio de 1881 en la estación de ferrocarril de Baltimore y Potomac por Charles J. Guiteau. El presidente había recibido un disparo en la espalda, pero, por suerte, la herida no lo mató. Lamentablemente, sin embargo, los médicos no pudieron localizar la bala y Garfield siguió sufriendo.

Uno de sus visitantes durante ese tiempo, Alexander Graham Bell, construyo un detector de metales específicamente para tratar de ayudar a encontrar esta bala, pero, por desgracia, sus intentos no tuvieron éxito. Resulta que los resortes de metal en la cama que el presidente Garfield estaba tendido confundían a la máquina y la hacía esencialmente inútil. Finalmente el Presidente Garfield murió de la infección de la herida el 19 de septiembre 1881.

Mejorando el Diseño Original del Detector de Metales

Aunque el primer detector de metales no ayudó a salvar el vigésimo Presidente de los Estados Unidos, la máquina que Alexander Graham Bell construyo, era un detector de metales viable y que pasó a ser el prototipo en el que posteriormente se basaron otros detectores de metales a partir de ese momento. Inicialmente, estas máquinas eran muy grandes, complicadas, y consistían en tubos vacíos pero eran muy útiles y como resultado siguieron aumentando en popularidad. Los detectores de metales más importantes se utilizaron en encontrar y eliminar minas terrestres y bombas sin explotar en toda Europa después de la Primera Guerra y la Segunda Guerra Mundial.

Casi al mismo tiempo Gerhard Fisher, fundador de Fisher Detectores de metal, hizo un descubrimiento importante en su trabajo de sistemas de navegación. Las ondas de radio que estaba usando se estaban distorsionando cada vez que había un mineral en las rocas de la zona. Como él estaba tratando de resolver las torceduras en su sistema, razonó que este tipo de tecnología en una escala más pequeña podría ser útil como un detector de metales. En 1925 le fue concedida a Fisher, la patente del primer detector de metales portátil y vendió su primera máquina de Fisher al público en 1931.

La década de 1950 a la actualidad de los Detectores de Metales

A pesar de que a Fisher se le concedió la primera patente de un detector de metales, es sólo uno de los muchos que refinó y perfeccionó la tecnología que actualmente se utiliza en los detectores de metales. Otro jugador importante en el desarrollo de detectores de metales de hoy en días es Charles Garrett, el fundador de Garrett Metal Detectors. Un ingeniero eléctrico de profesión, Garrett comenzó la detección de metales como un hobby a principios de 1960. Después de probar una variedad de las máquinas en el mercado, no podía encontrar uno que fuera capaz de hacer todo lo que quería. Así que empezó a trabajar en su propio detector de metales. Después de mucha investigación fue capaz de crear una máquina que eliminaba la deriva del oscilador y también creo varias bobinas de búsqueda únicas, así patentó todo, lo cual esencialmente revolucionó el diseño de los detectores de metales hasta ese momento.

Otros factores que han influido en gran medida al desarrollo de detectores de metales como los conocemos en la actualidad, incluyen transistores inventados en 1947 por John Bardeen, Walter Brattain y William Shockley; así como discriminadores, nuevos diseños de bobinas de búsqueda y la tecnología inalámbrica. Todos estos avances y más, han permitido que los detectores de metales se conviertan en equipos de peso ligero, portátiles, fáciles de usar y en las máquinas de búsqueda de profundidad que hoy conocemos.

Con el número de jugadores que participan tanto profesionales como aficionados, así como el rápido ritmo de los avances tecnológicos en su conjunto, el futuro de los detectores de metales es una incógnita. ¿Se puede garantizar que los detectores de metales seguirán evolucionando y cambiando con el fin de encontrar aún más tesoros? Los buscadores de tesoros simplemente no dejan de buscar y como se puede observar a través de la historia del detector de metales hasta este punto, es que estas personas apasionadas e inventivas que han hecho de los detectores de metales las máquinas que son hoy en día, van a seguir influyendo en el futuro de la detección de metales.

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